miércoles, 4 de junio de 2008
Películas que me formaron sin saberlo
Año 1985. Un niño de 14 años (porque entonces con 14 años aún se era un niño) ve “Los goonies” y, sin ser consciente de ello, descubre el ritmo cinematográfico, algo en lo que los estadounidenses han estado, están y estarán a años luz del resto del mundo. Igualmente interioriza que, en una película de aventuras, la acción debe avanzar en todo momento, los personajes pueden quedar perfectamente dibujados en unos cuantos planos, algunos de ellos se te alojan en el cerebro para acompañarte el resto de tu vida y un buen final es tan esencial como complicado (décadas después, aún se pregunta qué sería de Sloth a bordo del barco pirata y siempre sospecha, al toparse con una familia insoportable, que esconde a un freak de buen corazón en la buhardilla). También empieza a entender que las películas no se hacen solas, que el hecho de que un tal Steven Spielberg haya parido la historia tiene importancia y que no es casual que el encargado de desarrollarla sea el mismo guionista de “El secreto de la pirámide”, otra obra maestra ¡del mismo año! Y va completando su inconsciente formación con una televisión a la que no le importa programar en prime time “El capitán Blood", "Las aventura de Robin Hood" o El halcón y la flecha”, con las que realiza los mismos descubrimientos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
7 comentarios:
Yo tenía doce y salí flipado del cine Gurea de Algorta. A la factoría de tito Steven le agradezco pelotazos como esta peli, El secreto de la pirámide, los Gremblins (superior y escrita por el guionista de Los Goonies)...
Me encanta leer "porque entonces con 14 años aún se era un niño". Ahí te has salido, Otis.
Ostras yo la ví con 8 años y flipé. Luego la tuve en video VHS y me sabía los diálogos de memoria.
Mony, bienvenida al blog. Yo también pienso que a la gente que dice "si me tocara la lotería, no dejaría de trabajar" habría que reducirla a la esclavitud. Creo que la única película de la que he conseguido aprenderme diálogos de memoria es "Aterriza como puedas", lo cual dice mucho de mi capacidad intelectual.
Iván, yo a esa edad aún jugaba con el barco de los clicks... Uy, perdona, se me había olvidado que a ti nunca te lo trajeron los Reyes...
Otis: Hijodmñññññññññññññ.....
Eeeesto... es que yo... en fin, espero no molestar a nadie, pero es que.... no la he visto. ¿Es grave, doctor Otis?
Para nada, Tarquin. Sencillamente, no tuviste infancia.
Yo la vi en el cine de verano de Benidorm, con bocata y Mirinda mandarina, en una silla de enea. Igual que "Supermán" y "Loca academia de policía".
"El secreto de la pirámide" era un tesoro de VHS que solíamos alquilar mi hermano y yo repetidas veces.
Publicar un comentario