Foto de elpais.es tomada ayer. No se aprecia bien si se están saludando o lanzándose el uno al cuello del otro para estrangularse. Por encima de otros motivos, como la derrota electoral, su previo ejercicio radical de la oposición, sus condicionantes mediáticos o el escaso carisma de Rajoy, la crisis del PP reside en su condición de partido tampax, que sirve (o servía) para todos: defensores y enemigos de las políticas sociales, centristas y franquistas, ateos y legionarios de Cristo, acatadores de la sentencia del 11-M y empeñados en socavarla, gays y homófobos, corruptos e incorruptos... Y respecto al PSOE, tres cuartos de lo mismo, aunque domeñado el batiburrillo por el sorprendente carisma zapateril. Qué bien le vendrían a España cinco grandes partidos de cobertura nacional: uno de centro, otro de centro-derecha, un tercero de centro-izquierda y, a la vera de estos dos últimos, uno de derechas y otro de izquierdas. Recaería en el electorado la labor de orientar ideologías y decidir pactos. Del puto sistema electoral y de la consiguiente y contradictoria presencia en el Parlamento estatal de partidos contrarios al Estado mejor no hablar, que se me reproduce la úlcera.
miércoles, 28 de mayo de 2008
¿Se puede ser más falso?
Foto de elpais.es tomada ayer. No se aprecia bien si se están saludando o lanzándose el uno al cuello del otro para estrangularse. Por encima de otros motivos, como la derrota electoral, su previo ejercicio radical de la oposición, sus condicionantes mediáticos o el escaso carisma de Rajoy, la crisis del PP reside en su condición de partido tampax, que sirve (o servía) para todos: defensores y enemigos de las políticas sociales, centristas y franquistas, ateos y legionarios de Cristo, acatadores de la sentencia del 11-M y empeñados en socavarla, gays y homófobos, corruptos e incorruptos... Y respecto al PSOE, tres cuartos de lo mismo, aunque domeñado el batiburrillo por el sorprendente carisma zapateril. Qué bien le vendrían a España cinco grandes partidos de cobertura nacional: uno de centro, otro de centro-derecha, un tercero de centro-izquierda y, a la vera de estos dos últimos, uno de derechas y otro de izquierdas. Recaería en el electorado la labor de orientar ideologías y decidir pactos. Del puto sistema electoral y de la consiguiente y contradictoria presencia en el Parlamento estatal de partidos contrarios al Estado mejor no hablar, que se me reproduce la úlcera.
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3 comentarios:
La palabra que más precisamente define lo que siento al ver esa foto es hastío, en el sentido más pessoniano del término. La diferencia entre el aburrimiento y el hastío es que el segundo produce dolor. La sonrisa de estos dos personajes es como un cuchillo sin hoja al que le falta el mango: LA NADA, que avanza, como en La Historia Interminable. Es, querido Otis, otra prueba irrefutable de la inexistencia de Dios.
Saludos.
Jean Val Jan
Yo propongo tres partidos nacionales: EL PPSOE (la fusión total de la nada), NIUSG (NUEVA IZQUIERDA UNIDA SIN GASPAR) Y, claro, ¡UPyD!
Nota: Qué bien que hayas dejado la cueva del eremita y hayas perimitido cometarios, Zaratrusto.
Jean, es que no son personas, sino productos, y detrás de estos hay, efectivamente, nada.
Soy así de veleta y contradictorio, Reguera. Se te olvidan otros partidos: la COPE, la SER, El País, El Mundo...
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